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Llega el día en qué te fijas, y ya no es lo mismo todo a cambiado. No empezó en un día fijo, solo, con el tiempo se ha ido desgastando. Cada una habrá hecho sus errores, pero al fin y al cabo el resultado es el mismo. 

Solamente deseas que ojalá tarde o temprano todo vuelva a ser lo mismo. Contarnos cosas hasta las 3 de la mañana, morirte de ganas de que llegue el viernes para salir con ella, tener un problema y saber claramente a donde ir, despertar los sábados después de una noche de películas y palomitas. Esos son nuestros inviernos, espero que todo esto no llegue a desaparecer.